Hace apenas 72 horas fue publicado por el Comité de Medicamentos de uso Humano (CHMP) donde se ha recomendado la suspensión de comercialización de los medicamentos de administración sistémica que contienen ketoconazol. Esta recomendación se hará efectiva mediante la correspondiente decisión de la Comisión Europea. Además la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios recomienda no iniciar nuevos tratamientos con ketoconazol sistémico y revisar los tratamientos actualmente en curso.
Esta decisión esclarece que no afectará el uso del ketoconazol de administración tópica o local, argumentando que su absorción sistémica es muy pequeña y que su uso sistémico podrá seguir utilizándose para el tratamiento del síndrome de Cushing a través de los procedimientos establecidos para el uso de medicamentos en situaciones especiales.
Nosotros consideramos que este medicamento debe ser suspendido del mercado en su totalidad, atendiendo al largo historial de perjudiciales efectos colaterales por su uso, sobre todo por su alta toxicidad hepática y que ha sido confirmado por el desfavorable balance beneficio-riesgo que se ha logrado con la aplicación del ketoconazol. Insistimos en ello al ser reconocido que los datos disponibles sobre su eficacia son muy limitados en relación con las exigencias actuales y a la vez, por existir hoy en día alternativas terapéuticas disponibles que no tienen estos efectos dañinos, según la fuente: http://www.aemps.gob.es/informa/notasInformativas/medicamentosUsoHumano/seguridad/2013/NI-MUH_FV_21-2013-ketoconazol.htm
Atendiendo a ensayos clínicos realizados desde hace años con el uso tópico del aceite ozonizado, producto natural y de bajo costo, en comparación con el elevado precio que tiene en el mercado el Ketoconazol para el tratamiento de las afecciones micóticas de la piel, ha quedado evidente que con el primero se obtiene excelentes resultados, en menor tiempo de aplicación y sin exponerse a la toxicidad del Ketoconazol, aunque sea pequeña la absorción de este fármaco por la piel.
Los Hidroxi-hidroperóxidos de triglicéridos insaturados, como oxigeno activo: 8-12,8 % conseguidos mediante la reacción química del aceite de oliva con la mezcla de gas oxigeno-ozono que ocurre durante el proceso de elaboración del aceite ozonizado, lo convierte en un potente anti-micótico, pero también bactericida, cualidades que lo hacen superior a la hora de tratar las lesiones de la piel, como son los casos de la epidermofitosis y el impétigo, enfermedades que son muy propensas a sobre-infectarse secundariamente con las bacterias, complicando el cuadro sintomático y su evolución. Es importante señalar que el aceite ozonizado, por sus componentes naturales, no produce reacciones adversas a su aplicación en uso tópico.
Por otro lado la ozonoterapia, que no es más que la aplicación del ozono con fines médicos, ha desarrollado técnicas sistémicas como es la Auto-hemoterapia Mayor, conocida como “Blood washing”, “lavado de la sangre” y la insuflación rectal o colon-terapia, que tienen dentro de sus efectos biológicos una acción bactericida, fungicida y virisida, siendo un método alternativo, no convencional y muy eficaz, pero además y no menos importante, sin producir efectos adversos.
Es indudable que la medida de la suspensión del Ketoconazol, es el resultado de innumerables quejas por las graves reacciones hepáticas asociadas a su uso, pero lamentablemente solo comparadas con otros anti-fúngicos disponibles en el mercado, que también tiene efectos secundarios conocidos, pero ciertamente inferiores al dañino Ketoconazol.
Se hace evidente lo planteado por D’ AUTREC, cuando dijo que…. “La ozonoterapia, tiene posibilidades ilimitadas pero se le rodea de silencio por el solo hecho de que cura sin medicamentos” fin de la cita.