INTRODUCCIÓN.
Hoy 4 de mayo de 2024 es el primer sábado del mes y este día se celebra el Día Mundial de la Espondilitis Anquilosante, también llamada espondilitis reumática o espondilitis anquilopoyética, que es una patología de carácter inflamatoria, crónica y progresiva de origen inmunitario que afecta al 1% de la población a nivel mundial.
Por ello pretendemos visibilizar las causas e impacto de esta enfermedad autoinmune. Asimismo, sensibilizar a la población acerca de la importancia de efectuar un diagnóstico oportuno o en fases tempranas y que se conozca más sobre los efectos biológicos del ozono que le confieren unas propiedades terapéuticas y biológicas que posibilitan la aplicación de la Ozonoterapia en esta enfermedad reumatológica.
¿Qué son las enfermedades reumáticas?
¿Qué son las enfermedades reumáticas?
Las enfermedades reumáticas son aquellas que afectan al aparato locomotor. Dentro de estas se Incluyen más de doscientas enfermedades distintas que, en España, afectan a una de cada cuatro personas mayores de 20 años. Debido a ello, cuando se habla de reuma o de reumatismo es para referirse al conjunto de dolores o molestias relacionados con el aparato locomotor.
Las enfermedades reumáticas a la que con mayor frecuencia nos enfrentamos son:
- Artritis Reumatoide
- Espondilitis Anquilosante
- Lupus
- Fibromialgia y Fatiga Crónica
- Psoriasis
- Esclerodermia
- Polimialgia Reumática
Estas enfermedades afectan al sistema locomotor, comprometiendo en particular al:
- Sistema Óseo
- Sistema Muscular
- Las articulaciones.
Y se caracterizan por producir:
- Dolor
- Inflamación
- Rigidez muscular
- Limitación de la movilidad
- Deformidad articular.
Dentro de estas, las enfermedades autoinmunes sistémicas, como son el lupus, el síndrome de Sjögren, la esclerodermia o la dermatomiosotis, pueden afectar a otros órganos del cuerpo, como los riñones, el pulmón, la piel, el corazón, el cerebro, la vista, el sistema digestivo, etc. Pero hoy, nos ocuparemos de las características, síntomas y tratamiento de la Espondilitis Anquilosante (EA).
¿Qué es la Espondilitis Anquilosante?
La Espondilitis Anquilosante en lo adelante (EA) es una enfermedad de origen inmunitario e incurable, asociada con un alelo HLA-B27. Se caracteriza por dolores y endurecimiento paulatino de las articulaciones. La (EA) pertenece al grupo de espondiloartropatías seronegativas (ya que el paciente presenta Factor Reumatoideo (FR) negativo) y presenta una degeneración e inflamación crónica, de los tejidos de las articulaciones de la columna vertebral y sacroilíacas.
Se diferencia de otras enfermedades como la Artritis Reumatoidea (AR) que tiene el (FR) positivo y en este grupo están incluidas las Artritis reactivas, la artritis psoriásica, la inflamación intestinal llamada Enfermedad de Crohn, colitis ulcerosa crónica inespecífica (CUCI).
Síntomas y manifestaciones clínicas.
Algunos de los síntomas y manifestaciones clínicas más frecuentes de la (EA) se observan principalmente en la columna vertebral y los ligamentos, lo que se llama “entésis de la musculatura esquelética”, en especial de la región cervical, lumbar y las articulaciones iliosacra o sacroilíaca. También puede afectar otras articulaciones del cuerpo como la cadera, rodillas, hombros y el talón de Aquiles.
Durante el desarrollo de la enfermedad puede aparecer inflamación del iris (iritis) y de la úvea (uveítis), causando migraña y fotofobia. En ocasiones se acompaña de lesiones en riñones y pulmones. Como esta enfermedad causa mucho dolor e incapacidad, así como el endurecimiento paulatino de las articulaciones, ocasiona una flexibilidad reducida en la columna vertebral, generando una postura encorvada hacia adelante.
Prevalencia y morbilidad.
Anteriormente, se creía que (EA) era más frecuente en los hombres, pero en la actualidad se sabe que es por igual tanto en hombres como en mujeres y lo que sucede es que en las mujeres los síntomas son más ligeros y menos insidiosos.
Según la Fundación Española de Reumatología, las enfermedades reumáticas en España afectan a 1 de cada 4 personas adultas y en el caso de la (EA) se estima que en España más de medio millón de personas padecen esta enfermedad. Por otro lado, en América Latina la prevalencia de esta enfermedad es de 10,2 por cada 100.000 habitantes.
Generalmente, comienza los síntomas a los 20 – 25 años y muy rara vez a los 40 años (5%). Se conoce que esta enfermedad está estrechamente ligada al antígeno HLA B27, pero, aunque solo el 10 % de la población lo tiene, el 90 % de pacientes que están afectados por (EA), tiene presente este antígeno, el cual juega un papel muy importante en los mecanismos del funcionamiento del sistema inmunitario por lo que se considera una enfermedad hereditaria.
Como dato adicional, entre el 5 y el 10% de los pacientes presentan una patología intestinal inflamatoria sistemática y generalmente asintomática.
IMPORTANCIA DEL DIAGNÓSTICO PRECOZ.
Es muy recomendable acudir a consulta médica para descartar esta enfermedad cuando se presenten síntomas como:
- Dolor agudo en la parte baja de la espalda por más de tres meses.
- Rigidez matutina, con al menos una hora de duración.
- Limitaciones para expandir la caja torácica.
- Dolor e inflamación en hombros, rodillas, talones, tobillos y cuello.
Al no detectarse y tratarse a tiempo, esta enfermedad puede derivar en una gran discapacidad física, pérdida de la independencia, angustia emocional y disminución de la integración social.
TRATAMIENTO.
Debido a la dificultad para diagnosticar la (EA), desde su inicio pueden pasar de 5 a 7 años, incluso hasta 15 años en tratarla. Esto se podría evitar haciendo el diagnóstico en forma sistémica a la población que padezca dolor de espalda por más de 3 meses continuos y que sea menor de 45 años.
Hasta el momento, no se ha establecido una cura definitiva para esta enfermedad, la cual debe ser controlada por un médico reumatólogo y un equipo multidisciplinario de especialistas para mejorar el desempeño físico y emocional del paciente.
La ozonoterapia es una alternativa excelente para esta enfermedad. Con mayor efectividad si se empieza la terapia desde temprana edad, donde se podrán lograr buenos resultados, casi hasta permanecer asintomática y sin complicaciones importantes, siendo sus efectos biológicos comprobados mediante ensayos clínicos.
A nivel del sistema Inmune.
La aplicación de la mezcla oxígeno-ozono al reaccionar con los fluidos biológicos produce las (ERA) con la consiguiente liberación de interferones y aumento de factor de crecimiento transformante Beta, como así también induce el incremento de factor estimulante.
Estos derivados del uso del Ozono activan las funciones inmunomoduladoras básicas junto con la IL-2 y el FNT-a, como es la estimulación citogenética de las células inmunitarias.
Por el contrario, también induce la liberación de IL-10 y FGT-b1 y suprime el exceso de inmunoestimulación, lo que resulta en una programación ordenada o regulación controlada de la respuesta inmunológica.
A nivel celular.
También los productos de la reacción del O3, especialmente el H2O2 y los lipoperóxidos, se comportan como marcadores biológicos asociados con la mejoría del sistema inmune.
Según los estudios realizados, el empleo del ozono médico se puede usar como un fármaco más con actividad reguladora general, ejerciendo sus efectos al estabilizar el equilibrio redox celular. Además, los POL y el H2O2, generados por la descomposición del Ozono, se comportan como moléculas señalizadoras de estrés, lo que mejora el equilibrio energético celular y el sistema inmune en beneficio de esta enfermedad reumatoide y otras enfermedades autoinmunes.
Nosotros preferentemente usar la Ozonoterapia por la técnica de (AHMA) a dosis inicial de 20-30 mcg por kilo y durante dos a tres sesiones por semana hasta llegar a las 20 sesiones.
Por lo general la combinamos con las aplicaciones paravertebral, cervical, lumbar, intraarticular, sacroilíaca o en las articulaciones en donde sea necesario, dosis de 10- 20 ml con una concentración de 10-15 mcg por ml.
CONCLUSIONES:
Aunque la espondilitis anquilosante puede ser debilitante, aun con el tratamiento adecuado, la mayoría de las personas con esta afección pueden llevar vidas productivas y gestionar sus síntomas. Si tienes alguna preocupación o experimentas síntomas, te recomiendo que consultes a un profesional médico para obtener un diagnóstico preciso y un plan de tratamiento personalizado.
La Ozonoterapia es una excelente alternativa para el tratamiento de la Espondilitis Anquilosante. Si le interesa conocer más sobre la aplicación de la Ozonoterapia en esta o en otras enfermedades reumatológicas, no dude en contactar con nosotros en el Instituto Idiozone.